Invertir en bienes raíces comerciales tiene sus propias ventajas en comparación con otras opciones de inversión. Para ayudarle a determinar si este mercado es adecuado para usted, hemos recopilado los principales beneficios de esta tendencia en un solo lugar. En particular, consideraremos invertir en bienes raíces comerciales en una de las regiones más atractivas para esto: Barcelona, España.
- Invertir en bienes raíces comerciales, especialmente con inquilinos existentes, proporciona ingresos estables. Al invertir una vez, el propietario recibe beneficios regulares todos los meses. La tarea principal del propietario es monitorear la situación y reemplazar a los inquilinos si dejan de pagar el contrato a tiempo. Si es necesario, estas responsabilidades pueden transferirse a sociedades gestoras especializadas que resolverán todos los problemas que surjan por un porcentaje previamente acordado de las ganancias.
- El rendimiento de la inversión en bienes inmuebles comerciales en moneda extranjera suele superar el rendimiento de los depósitos en moneda extranjera en cualquier banco. Estamos hablando de bancos occidentales con divisas fuertes, donde los tipos de interés son muy bajos o negativos. En Barcelona, con el enfoque correcto, se puede lograr una rentabilidad de alrededor del 4-5 por ciento anual después de impuestos en bienes raíces comerciales. Además, los propios bienes inmuebles se están volviendo cada vez más caros con el tiempo. Si elige el momento adecuado para vender, puede ganar mucho dinero con la diferencia entre el precio de compra y el de venta, especialmente evitando las ventas durante los períodos de crisis. En condiciones en las que los bancos rusos no sólo no ofrecen tipos de interés normales, sino que también cobran comisiones por almacenar moneda, las inversiones en bienes raíces comerciales extranjeros se vuelven especialmente rentables.
- Los bienes raíces son bienes inmuebles que se pueden ver y tocar. A diferencia de los activos virtuales, cualquier inmueble conserva su valor, independientemente de los acontecimientos mundiales. Por ejemplo, los locales para una tienda de comestibles seguirán teniendo demanda incluso en situaciones extremas, ya que la necesidad de alimentos siempre será relevante. La propiedad no desaparecerá debido a errores de los corredores y es difícil para los estafadores robarla, especialmente en países con un sistema legal confiable. No perderá su valor instantáneamente, como puede ocurrir con las acciones, ni dejará de existir, como ocurre a veces con los bancos. Por lo tanto, podemos decir con confianza que los bienes raíces comerciales son un activo confiable que puede transmitirse a sus descendientes.
- La naturaleza a largo plazo de la inversión, que algunos pueden considerar una desventaja, es en realidad una ventaja significativa para los inversores serios. Los profesionales suelen comprar bienes raíces comerciales con una perspectiva de tenencia de 7 años o más. Esto significa que no tendrá que revisar su cartera de inversiones cada seis meses, buscar nuevas oportunidades o preguntarse por qué activos que antes eran rentables ahora generan menos ingresos. No tendrá que lidiar con rendimientos cada vez menores, como suele ocurrir con los bonos a medida que se acercan a su fecha de vencimiento. Tampoco es necesario renegociar periódicamente los contratos con los bancos en condiciones nuevas, normalmente menos favorables. La inversión en bienes raíces comerciales funciona de manera simple: usted invierte dinero y obtiene ingresos hasta que llega el momento adecuado para vender la propiedad. No es necesario establecer un período máximo de tenencia, ya que los bienes inmuebles comerciales no están limitados en el tiempo.
- Los términos del contrato de arrendamiento de bienes inmuebles comerciales pueden ser determinados libremente por las partes de la transacción. El propietario puede incluir en el contrato las disposiciones que considere necesarias si el inquilino está de acuerdo con ellas. Todo está regulado por el mercado. A diferencia del mercado de valores, donde todo está estrictamente controlado por la ley, no existe una estandarización ni regulación excesivas. Los inmuebles comerciales también tienen ventajas sobre los inmuebles residenciales, que a menudo se compran para alquilar. No es fácil desalojar a un particular y a su familia incluso si se violan los términos del contrato o se daña la propiedad, especialmente en España, donde se requiere una decisión judicial. Además, en España y muchos otros países, la ley limita la frecuencia y el tamaño de los aumentos del alquiler residencial, protegiendo a los inquilinos privados. Mientras que los inquilinos comerciales celebran contratos en términos de mercado, sin dicha protección gubernamental, lo que permite a los propietarios de propiedades comerciales una mayor flexibilidad en la gestión de sus propiedades e ingresos.
Entonces, ¿por qué, a pesar de todas estas ventajas, muchos todavía prefieren invertir dinero en cuentas bancarias o comprar apartamentos y villas en España para alquiler periódico en lugar de inmuebles comerciales? Muchas de estas propiedades permanecen vacías la mayor parte del tiempo, lo que requiere costos adicionales por parte del propietario.
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